La empresa ha adquirido un nuevo analizador de redes, el Fluke 437, que facilitará a nuestros técnicos la resolución de averías y obtener un mayor rendimiento de las instalaciones fotovoltaicas.
Parte de la plantilla del Grupo IGM ha recibido estos días un curso sobre calidad eléctrica, una formación indispensable a raíz de la adquisición del moderno y potente analizador de redes Fluke 437 por parte de la entidad empresarial. El encargado de impartir el curso fue un representante de la propia distribuidora de los productos Fluke en Andalucía.
La primera parte del seminario fue eminentemente teórica. En ella, los asistentes repasaron los conceptos de tensión, intensidad, coseno de fi y, en especial, los principales problemas que pueden aparecer en las redes eléctricas de las empresas: inestabilidad de las tensiones, variaciones en la frecuencia, desfases y sobre todo armónicos.
Cabe recordar que, salvo casos muy puntuales, el suministro eléctrico de las grandes compañías tiene una calidad más que aceptable, de modo que en la inmensa mayoría de los casos es nuestra propia instalación la que genera problemas.
Hace 50 años, la lógica de las máquinas era cableada, no existían variadores y, sobre todo, el uso de la electrónica de control y de potencia era testimonial. Con el paso de los años, la irrupción e implantación de la electrónica ha sido la causante de que surjan problemas como los anteriormente citados.
Por otro lado, la segunda parte del curso se centró en la explicación de los menús del analizador Fluke 437 y de su utilización en las diferentes configuraciones.
El empleo de este instrumento por parte del área de mantenimiento de instalaciones fotovoltaicas del Grupo IGM permitirá ofrecer un servicio inmejorable, ampliando la capacidad de nuestros técnicos a la hora de resolver averías y conseguir un mejor rendimiento de cada instalación gracias a la función especial de análisis de inversores.